Pasajes de los Escritos de Bahá'u'lláh
CIX
¡Oh Kamál! Las alturas que, mediante el munífico favor de Dios, puede alcanzar el ser mortal, en este Día, aún no han sido reveladas a su vista. El mundo de la existencia nunca ha tenido ni posee todavía la capacidad para tal revelación. Sin embargo, se aproxima el día en que serán manifestadas ante todos las potencialidades de tan grandioso favor en virtud de Su mandato. Aun si los ejércitos de las naciones se dispusieran en formación para atacarle, aun si los reyes de la tierra se aliaran para socavar Su Causa, la fuerza de Su poder permanecería inmutable. Él, ciertamente, habla la verdad e invita a toda la humanidad al camino de Aquel que es el Incomparable, el Omnisciente.
Todos los seres humanos han sido creados para llevar adelante una civilización en continuo progreso. El Todopoderoso es Mi testigo: Actuar como las bestias salvajes no es digno del hombre. Las virtudes que corresponden a su dignidad son la tolerancia, la misericordia, la compasión y bondad hacia todos los pueblos y razas de la tierra. Di: ¡Oh amigos! Bebed a plenitud de esta corriente cristalina que fluye por la gracia celestial de Aquel que es el Señor de los Nombres. Dejad que, en Mi nombre, otros participen de sus aguas, para que los gobernantes de todos los países reconozcan plenamente el propósito para el cual la Verdad Eterna ha sido revelada y la razón por la cual ellos mismos han sido creados.