Pasajes de los Escritos de Bahá'u'lláh
CXLVIII
¡Oh Salmán! Todo lo que han dicho o escrito los sabios o místicos nunca ha excedido las limitaciones a que ha estado estrictamente sujeta la limitada mente humana, ni podrá jamás esperar excederlas. A cualquier altura que se remonte la mente más excelsa, por muy grandes que sean las profundidades en que penetre el corazón comprensivo y desprendido, esa mente y ese corazón no podrán nunca trascender aquello que es lo creado por sus propios conceptos y el producto de sus propios pensamientos. Las meditaciones del pensador más profundo, las plegarias del más santo de los santos, las más elevadas expresiones de alabanza de lengua o pluma humanas, no son sino un reflejo de aquello que ha sido creado dentro de ellos mismos, mediante la revelación del Señor, su Dios. Quien medite en su corazón sobre esta verdad fácilmente admitirá que hay ciertos límites que nadie puede traspasar. Todo intento que, desde el principio que no tiene principio, se haya hecho para representarse a Dios y conocerle está limitado por los requisitos de Su propia creación, creación que Él ha hecho existir por la acción de Su propia Voluntad y no para los fines de nadie sino los de Su propio Ser. Inmensamente exaltado es Él sobre los afanes de la mente humana por concebir Su Esencia, o los de la lengua humana por describir Su misterio. Ningún lazo de relación directa podrá jamás unirle a las cosas que Él ha creado, ni pueden las más abstrusas ni las más remotas alusiones de Sus criaturas hacer justicia a Su ser. Por Su Voluntad que domina a todo el mundo, Él ha dado la existencia a todas las cosas creadas. Él está velado en la antigua eternidad de Su propia Esencia, exaltada e indivisible; siempre lo ha estado, y continuará eternamente encubierto en Su inaccesible majestad y gloria. Todo lo que hay en el cielo y todo lo que hay en la tierra ha sido creado por Su mandato, y por Su Voluntad todos han salido de la nada absoluta al dominio de la existencia. ¿Cómo puede, entonces, la criatura que la Palabra de Dios ha formado comprender la naturaleza de Aquel que es el Anciano de Días?