Pasajes de los Escritos de Bahá'u'lláh

CLXII

El Todomisericordioso ha conferido al hombre el sentido de la vista y le ha dotado de audición. Algunos le han descrito como el “mundo menor”, cuando en realidad, debería considerársele como el “mundo mayor”. Las potencialidades inherentes a la posición del ser humano, la medida plena de su destino en el mundo y la excelencia innata de su realidad deben ser todas puestas de manifiesto en este Día prometido de Dios.

La Pluma del Altísimo, en todo tiempo y en todas condiciones, ha recordado, con alegría y ternura, a Sus amados, y les ha aconsejado seguir Su camino. Bienaventurado aquel a quien ni los cambios ni los azares de este mundo han impedido reconocer la Aurora de la Unidad de Dios, quien ha bebido, con resolución inquebrantable, y en nombre de Quien subsiste por Sí mismo, el vino sellado de Su Revelación. En el Libro de Dios, el Señor de todos los mundos, esa persona será contada entre los moradores del Paraíso.