Pasajes de los Escritos de Bahá'u'lláh

LXI

El mundo padece y su agitación aumenta día a día. Su rostro se ha vuelto hacia el descarrío y la incredulidad. Tal será su condición, que exponerla ahora no sería apropiado ni correcto. Su perversidad continuará por largo tiempo. Y cuando llegue la hora señalada, aparecerá súbitamente aquello que hará temblar los miembros del cuerpo de la humanidad. Entonces, y sólo entonces, será desplegado el Estandarte Divino, y el Ruiseñor del Paraíso gorjeará su melodía.